En enero hace 42 años que Santa Coloma pide el parque de Can Zam y todavía no lo tenemos del todo. Tenemos, eso sí, una zona pequeña pero bonita alrededor del lago, bien arbolada, con juegos infantiles y picnic. Pero, en cambio, la parte próxima a la Cacaolat es muy pobre Hilo de plataneras y nada más-; la plaza central de cemento, enorme, está desaprovechada cuando se podrían hacer ferias, circo, teatro y música de pequeño formato; y una parte del jardín Moragues está cerrada, como también lo están las 5,1 hectáreas de la llamada 2ª fase (pasado el Instituto Puig Castellar). Para esta zona, el equipo de gobierno ha abierto un proceso pseudoparticipatiu, tendencioso, sin garantías y que incumple el Reglamento de participación, para justificar su intención de convertirla en una explanada para macroconciertos, arguyendo que la gente lo ha «votado», en vez de la zona verde que pactó con la Plataforma en Defensa de Can Zam.
Pero un parque no es lugar para hacer Rock Fest o Tomorrowland con miles de personas; para ello ya está el Foro.
El equipo de gobierno debe terminar de una vez el parque verde y frondoso que nos merecemos. No pedimos otra cosa que lo que ya tienen todas las ciudades catalanas de más de 80.000 habitantes.