El pasado mes de octubre se iniciaron los trabajos para recuperar y ampliar el parque de Can Zam. Estos permitirán sacar las vallas, renaturalizar el espacio y aumentar el drenaje del suelo donde, en estos momentos, hay un terreno vacío. El proyecto incluye un claro carente de verde y la apertura del último tramo de Anselm del Riu que pasa por medio del espacio de Can Zam y que generará un gran volumen de tráfico.
La conferencia sobre el cambio climático COP26 de Glasgow vuelve a poner de manifiesto la importancia de los espacios verdes en la capacidad de resiliencia de las ciudades y el impacto de los combustibles fósiles en la salud y la vida de las personas. En este sentido, el gobierno de la ciudad no sigue la línea de otras ciudades para reducir el tráfico de vehículos privados.
Desde Esquerra Republicana no compartimos el proyecto que se está llevando a cabo: el claro polivalente y la apertura al tráfico de la calle son los puntos discordantes. Pero somos conscientes de la importancia de empezar la transformación y recuperación de este espacio por la ciudad. Y nos felicitamos de haberlo logrado entre todos. La zona de Can Zam aún incluye piezas por transformar: zonas verdes y equipamientos, los accesos y la reconfiguración de zonas de la primera fase. Es necesario que el diseño del espacio sea global de forma que integre las diferentes zonas del parque.
Otra de las lecciones que debemos extraer de la COP26 es la relevancia de la colaboración entre sociedad civil y administración en el diseño y planificación de estrategias para construir espacios habitables. Crear y facilitar espacios de diálogo es responsabilidad de todos. Nos va la salud, la del planeta y la nuestra.
El Parque de Can Zam
Salvador Clavera