Utilizar el espacio público para hablar de lo público. Hablar de las necesidades, las carencias y las propuestas de futuro sobre los derechos y las necesidades básicas de las personas. Y no estamos hablando de las típicas carpas de los partidos políticos, sino de lo que están haciendo nuestras vecinas y vecinos. Las asambleas de la FAVGRAM sobre los cierres de oficinas bancarias y los precios abusivos de las facturas de la luz. La PAHV hablando del grave problema de vivienda y la lacra de los desahucios. La plataforma de Serra de Marina y Can Zam preparando movilizaciones para tener el parque verde y frondoso que nos merecemos. Concentraciones ante los CAPs para la lucha de la atención primaria con Santako Diu Pro. El lunes en la plaza de la Vila donde la Marea Pensionista reclama pensiones dignas gobierne quien gobierne. El primer martes de mes donde Artemis llamamiento en contra de la violencia machista. Todos estos son ejemplos de reivindicaciones a pie de calle donde hay que escuchar a la gente y compartir las reivindicaciones de las vecinas y vecinos de nuestra ciudad.
Las colomenses y colomenses tienen mucho que decir y explicar. La escucha activa se practicará. Escuchar para entender el otro no siempre es fácil pero con una buena escucha activa nos permite llegar al fondo de los problemas y buscar soluciones consensuadas. Cuando participamos de estas movilizaciones vemos los problemas del día a día que más preocupan. Es entonces donde tiene sentido trabajar las posibles soluciones que, como gente común que somos, nos proponemos trabajar desde En Común Podemos. Porque hay soluciones posibles y valientes. Una gran metrópolis como Barcelona que tiene un operador energético municipal, las medidas sobre la vivienda pensadas para las personas y no para los grandes tenedores, renaturalizar la ciudad con zonas verdes, ofrecer un dentista municipal asequible, ... Si es posible en una gran metrópoli también lo mejor en nuestra ciudad. Para que los derechos de todas se defienden en la calle. Volvemos a las calles.