La pasada moción presentada por nuestro grupo municipal fue retirada en el Pleno tras el anuncio del Gobierno que propone una bajada del 20 % de la tasa de residuos urbanos y su compromiso de estudiar su retirada del recibo del agua. Valoramos este gesto como un primer paso valiente, especialmente significativo cuando se gobierna con mayoría absoluta. Reconocemos que rectificar no siempre es fácil y celebramos que el Gobierno haya sabido escuchar la voz de la calle y el trabajo realizado desde el Pleno y desde nuestro grupo. Ahora comienza una nueva etapa. Negociaremos nuevas mejoras, como una rebaja del IBI, bonificaciones reales por reciclar y, de forma prioritaria, la retirada definitiva del cobro de la tasa en el recibo del agua, para avanzar hacia un modelo más justo y sostenible para todos. La tasa fue como una tormenta de nubes oscuras que cubrió Santa Coloma, descargando inquietud y malestar sobre nuestros barrios. Pero no se equivoquen: la zona de bajas emisiones se aproxima como una marea silenciosa, como esas mareas traicioneras de las costas gallegas que rodean sin hacer ruido, pero acaban ahogando a quien no está preparado. No convirtamos esta marea en un caldo de cultivo para el búzio, ese caracol de mar carroñero que se alimenta de la quietud y de la descomposición. No permitamos que el inmovilismo alimente a quienes solo buscan la degradación de esta ciudad para crecer y multiplicarse. Por eso invitamos públicamente al Gobierno municipal a sentarse a negociar en condiciones reales. Compartimos el objetivo de un aire más limpio y una ciudad más habitable. Hagámoslo con cabeza y corazón, sin dejar a nadie atrás y acompañando a toda la ciudadanía en este camino común.