Un año más llega el verano, y las altas temperaturas vuelven a marcar el ritmo de vida. De nuevo, madres y padres nos trasladan sus quejas por el calor que deben soportar los niños en las aulas durante las últimas semanas lectivas. No es un problema nuevo: ocurre cada año. Aunque instalar aire acondicionado quizás no sea viable por el corto periodo, sí podrían colocarse toldos, láminas reflectantes y ventiladores para mitigar el calor.
Nuestros vecinos siguen sufriendo la inmoral y draconiana tasa de gestión de residuos en el recibo del agua, sin baremos que contemplen la generación real. Por ello exigimos su retirada del recibo del agua, un cálculo más justo y una compensación mediante una rebaja del IBI. Mientras tanto, las cucarachas celebran su particular Rock Fest diario en las calles por el deficiente control de plagas.
Son muchos los asuntos que han quedado en el tintero en lo que va de año por parte del Gobierno municipal.
Llega el verano, una época para poner en orden ideas, descansar y afrontar con energía el resto del año. Solo me queda desear a todos unas buenas vacaciones, con la esperanza de que a la vuelta lleguen soluciones reales a los problemas de siempre.